Queridos amigos, changos todos:

He visto con asombro y alegría la profusión de blogs, el interés en comentar el trabajo de los demás, y las ganas de seguir creando historias, juegos, y en masterear. He de decir que esto es, en parte, por la sangre nueva (sangre, me gusta eso) que ha ingresado al grupo, y también por el sentimiento de orgullo renovado que ha aparecido entre, ejem, los más viejos del grupo.

Me ha gustado este cambio. Me ha gustado porque me dice que seguimos vigentes, con ganas de hacer cosas, con ganas de inventar, de reírnos de la banalidad, y, más que todo, de seguir aprendiendo. Estas cosas hacen que me sienta orgullosa de ser parte de esto que, creo, se volverá más grande de lo que sospechamos.

No puse un saludo de Navidad porque habría sido mamón. Prefiero, en cambio, expresar mis buenos deseos y compartir la alegría que tengo por sentirlos mis compañeros en una fecha cualquiera. Así, este saludo no se pierde en medio de tanta tarjeta barata o cadena de e-mail.

Saludos, amigos, que aunque estemos lejos, seguimos estando juntos.

Mortwen, la master.